Infórmate Hoy y Siempre

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domingo, 24 de mayo de 2009

HISTORIA SOCIAL DOMINICANA:UNA GESTAPO EN AMERICA DE JUAN ISIDRO JIMENES GRULLON

Juan Isidro Jimes-Grullón


1- Introducción

El informe que hemos redactado en esta ocasión es el resultado del análisis hecho a una de las obras más preclara y cercana a la verdad de lo que significó el trance de la dictadura más cruenta y perversa en la historia de la República dominicana, del Caribe y en toda América Latina en el siglo XX.

En esta obra de carácter histórico hemos visto como son narrados episodios inconcebibles. Sólo en la mente de personas carentes de raciocinio y alejado de cualquier forma de ética y sensibilidad cabe elaborar métodos de la índole de los que se han relatado en este libro de gran valor histórico para la generalidad de los dominicanos que siente amor por su patria.

Parecería que la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo Molina es el resumen de todos los gobiernos autoritarios, que desde la Edad Media, cuando se originaron, hasta nuestros días, ha llenado de sangre y sufrimiento los países donde se han establecido.


Veremos como la corrupción, la politiquería, la infamia, la opresión, la lisonja, la genuflexión, lo inmoral, el crimen y las perversidades más nefastas caminaban por sus fueros desde el 30 de mayo1930, cuando un joven abogado de Santiago (Rafael Estrella Ureña) se prestó a hacerle el juego político, hasta 30 de mayo de 1961, cuando este monstruo calló abatido en la carretera que conducía a su Estancia Radhamés en San Cristóbal.

Por razones lógicas, ya que el escenario es la cárcel de Nigua durante los años 1934-1935, haremos más hincapié en el sufrimiento y vejámenes que padecieron el autor de esta valiosa pieza histórica (Juan Isidro Jimenes Grullón) y un grupo de jóvenes y hombres maduros que trataron de poner fin a un pequeño monstruo que luego se convertiría en un pulpo con tentáculos inalcanzables. Sin embargo no dejaremos de complementar este informe con cualquier dato que entendamos valioso.

2- Desarrollo

2.1 Llegada de Trujillo al poder

Rafael Leónidas Trujillo Molina nació un jueves 24 de octubre de 1891 en San Cristóbal. Sus padres José Trujillo Valdez (de pocos escrúpulos y bebedor empedernido) y Altagracia Julia Molina. Durante su niñez, recibió educación básica en su casa y el colegio don Pablo Barina. Su formación escolar no pasó de la educación básica. Previo a la intervención estadounidense de 1916-1924, cuando ingresa al ejército, se dedicaba a cometer delitos comunes como el robo de animales y (cuatrero).
Ingresó 1917 a la Guardia Nacional (creada en abril de 1917) como informante de los marines norteamericanos, gracias a recomendaciones que hiciera su tío Teódulo Pina Chevalier a su amigo, el Coronel McClean, quien no vaciló en ingresarlo para que desempeñara dicha función (Miguel Aquino García.- Holocausto en el Caribe/1997/pag. 16).
Rafael Leónidas Trujillo Molina
Durante los primeros meses de invasión, los marines norteamericanos silenciaron y desarmaron a gran parte de la población insurrecta. Sólo quedaron algunos focos de resistencia en la zona Este del país. Fue precisamente en esa parte del país donde Trujillo comenzó a desarrollar sus habilidades de perverso y opresor cuando se dedicaba a perseguir a supuestos gavilleros "que cometían fechorías en esa zona". Con su actitud, éste maravillaba a los marines, quienes reconocieron rápidamente que él sabía actuar como ellos, en contra de los pobres infelices que únicamente procuraban una nación libre.

Así, fue adquiriendo notoriedad dentro de la Guardia Nacional hasta el punto que los soldados estadounidenses decían:"Trujillo actúa como un marine", y eso les complacía en gran medida. Ya para 1922 cuando los norteamericanos hacían los aprestos para desocupar el país, éste ocupaba el cargo de segundo teniente; y para 1930, cuando orquestó el golpe de Estado contra quien le había puesto el poder militar en sus manos, el presidente Horacio Vásquez, ya el sanguinario ostentaba el cargo de jefe del ejército.

Claro está, aprovechó el poli partidismo y caudillismo reinante en el país para esos años. Además la ineficacia y la pretensiones de Horacio Vásquez querer prolongar su periodo presidencial. Ante este escenario, el pueblo preferiría cualquier cosa diferente a lo que imperaba en esos momentos. A pesar de que Trujillo era el menos indicado para ocupar la presidencia, por lo que hubo una gran resistencia a sus aspiraciones, pero éste se aprovechó del poder militar y el descontento que el pueblo tenia por el mal gobierno de Vásquez en su fase final, y bajo una farsa electoral el 30 de mayo de 1930 inicia una de las dictaduras mas tétricas de nuestro país, La Era de Trujillo, la cual superó con creses todos los gobiernos autocráticos que había tenido el país en su historia republicana, llámese el de Báez, o el de Lilís.

2.2 Inicio de la Era y las conspiraciones en su contra

Es bajo un estado de terror y persecución política que se inicia este fatal período de la dictadura de Trujillo, lo que comenzó a perturbar la tranquilidad del pueblo y la mente de la clase liberal de la época, que en algún momento dio su apoyo al déspota, confiando que sería un aliciente a las calamidades de toda índole que el pueblo padecía, craso error.

Pero la copa se derramó cuando se tenía la información de que pretendía prolongarse en el poder a partir de 1934, cuando debía terminar su primer mandato.

Es precisamente en este escenario que el coronel Leoncio Blanco, quien había apoyado al tirano, organizó una conspiración para asesinar al dictador y derrocar su régimen; pero fracasó y pago este fracaso con su vida y la de muchos de sus seguidores. Sin embargo este fracaso no mermó la necesidad de poner fin a un monstruo en formación, y es por eso que un grupo de jóvenes y veteranos santiagueros, encabezados por Juan Isidro Jimenes Grullón, Ramón Vila Piola y Daniel Ariza deciden poner fin a esas aspiraciones maldita de este ser basilisco en la Conspiración de Santiago, cuando este asistiera el 30 de marzo de 1934 a un Te Deum en la Iglesia Mayor de Santiago.

2.3 Fracaso de la Conspiración de Santiago
Esta nueva conspiración fracasó, ya que los comprometidos con llevarla a cabo no pudieron ponerla en ejecución por algunas diferencias tanto de forma como de contenido. Pues, uno de los principales, desde el punto de vista intelectual, Juan Isidro Jimenes Grullón convocó una reunión en su casa con Vila Piola y Daniel Ariza, en la que dejó establecido de que la fecha escogida para llevar a cabo el magnicidio en la fecha prevista, cosa esta que molestó mucho a Ramón Vila Piola, quien entendía que ese era el momento preciso para acabar de una vez con este engendro.

El joven Vila Piola, no conforme con lo expuesto por Jimenes Grullón, decide ponerse en contacto con los integrantes de su grupo -pues eran tres los grupos organizados para ejecutar el hecho- para realizar el tiranicidio en el Centro de Recreo de Santiago, donde se le dedicaba una fiesta al "Jefe". Daniel Ariza acuerda ponerse al frente de movimiento que va a terminar con la vida del dictador Trujillo, por lo que se colocaría en el punto central de lugar, ocupando así la puerta con sus veteranos, mientras que los jóvenes de Vila Piola y los estudiantes se apostarían en ambos lados desde la iglesia hasta el sitio donde iba a presentarse Trujillo. Ariza y sus hombres abrirían fuego, secundado por los otros dos grupos, dirigidos por Vila Piola. Sin embargo cuando llegó el momento de ejecución, los hombres de Ariza no aparecieron como se había acordado, solamente los de Vila piola y algunos estudiantes normalistas con cuatro revólveres viejos que el viejo Ariza les había facilitado.

Los hombres de Vila Piola estaban dispuestos a actuar, pero era muy difícil hacer blanco desde el lugar donde estaban, tanto por sus posiciones como por lo inexperto que eran en el uso de las armas de fuego. No conforme con esta nueva situación, Vila Piola se presenta personalmente en el escenario de la fiesta para ejecutar la muerte del opresor, pero fue convencido por un amigo suyo – el gobernador del Centro Recreativo- quien lo desarmó y guardo el arma.

Fracasado estos intentos, el joven Vila Piola y sus hombres comenzaron a realizar campaña de agitación. Estas consistían en hacer estallar petardos en diferentes puntos de la ciudad de Santiago para obstaculizar el gobierno en sus planes electorales. Así, procedieron a colocar bombas en algunas instituciones dirigidas por funcionarios que alentaban el continuismo de Trujillo, siendo un de éstas, el correo. Para el 10 de mayo de 1934, Vila Piola hizo estallar una bomba en el edifico de Correos, produciéndose a las 10:00 pm de ese día.

Es bueno destacar que entre las organizaciones opositoras a las ambiciones de Trujillo se encontraba se encontraban: El Centro de Estudio Sociológico, Asociación de Instrucción para Obreros y Campesinos, creadas por jóvenes estudiantes y profesionales de la hidalga ciudad corazón.

Es necesario mencionar la Sociedad Amante de la Luz, sociedad de intelectuales que Jimenes Grullón presidía por su formación profesional en Francia.




2.4 Consecuencias del fracaso de la Conspiración de Santiago

Inmediatamente fracasó la conspiración, los secuaces y los cuerpos represivos de la dictadura comenzaron a investigar sobre las explosiones que se habían producido en la ciudad.

A los once días de iniciarse las explosiones, Ramón Vila Piola fue apresado y llevado a la Fortaleza de San Luis en Santiago, donde pudo defenderse, a pesar de las acusaciones que le hacia el chofer con quien se trasladaba a la ciudad de Santo Domingo a comprar los materiales con los que se fabricaban las bombas y petardos, utilizando como argumento que eran cartuchos de escopetas los que compraba en Santo Domingo.

Este iba a ser puesto en libertad, pero protestó, pidiendo castigos para los militares que le habían propinado varios culatazos, con lo que desató la ira de los militares, siendo regresado de nuevo al calabozo.

Este, a pesar de su encierro en una solitaria, pudo mantener el contacto con sus hombres para que ellos siguieran provocando estallidos y así hacerle ver al gobierno que no era él quien producía las agitaciones subversivas.

Ante la situación difícil para el gobierno, ya que no quería que ésta se le fuera de las manos, Trujillo se presentó personalmente ante Vila Piola y le dirigió palabras irónicas a las que Vila Piola respondió en tono agresivo, por lo que fue trasladado en la noche a la penitenciaria de Nigua junto al chofer que lo había acusado.

Ya en el presidio, donde la vida no tenía ningún valor, vio llegar a otros hombres en condición de presos, entre ellos, José Najul –uno de los partícipes del complot para terminar con la vida de Trujillo, a quien preguntó por Jimenes Grullón. Éste respondió diciendo que Jimenes Grullón se estaba arreglando con el gobierno para ocupar la Secretaria de Estado de Sanidad, lo que según Vila Piola lo llenó de indignación, más el fracaso de la conjura, de la que él entendía que Jimenes Grullón tenía mucha culpa, lo llevó a redactar una carta para Trujillo, en la que le hacía saber quiénes eran los involucrados, no de las explosiones, sino de matarlo la noche del 30 de marzo. En ese momento delató al general Daniel Ariza y al médico Juan Isidro Jimenes Grullón.

Siendo, inmediatamente, arrestado Ariza y luego, a pesar de que se dio a la fuga, Jimenes Grullón.

2.5 Jimenes Grullón en la cárcel de Nigua

El 19 de julio de 1934, fue apresado Jimenes Grullón, después de un llamado que le hicieran sus familiares, de que las cosas se iban a resolver. El médico accedió al llamado pensando que las cosas no iban a ser tan complicadas como, de hecho, resultaron. Después de varios días, fue trasladado junto con su padre a la temible cárcel de Nigua, la cual no tenía nada que envidiar a los campos de concentración de la Alemania Nazi. Allí comenzó a entender y comprender lo que padecían aquellos que no tenían riqueza y que eran objeto de olvido de la sociedad por sus condiciones sociales. Este joven, había contado con el

apoyo de sus padres, que lo mandaron a estudiar al extranjero (Francia) donde adquirió una educación y formación de primera. Ahora iba a contactar la dureza de la vida infrahumana que se padecía en el espantoso presidio de Nigua.
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Juan I. Jimenes G
En este presidio le aguardaba como lecho para dormir; un piso frío y sucio, como instrumento para comer; sus manos sucias, como ropa de vestir diariamente; el uniforme rayado de preso (sucio de tierra y lodo durante seis días), como vasija para beber agua; sus manos y luego un vaso de un ex presidiario que había muerto de tuberculosis, como medio de sustentación, ya no era su profesión médica, sino el trabajo forzoso e inhumano para él, ya que no había estado acostumbrado al desyerbo de doce horas agotadoras y así toda esas pesadumbres que había que vivir en esta cárcel para la cual rezaba un dicho que decía:"es mejor tener cien niguas en un pie que un pie en Nigua", en alusión a la ignominia y tortura que en ese lugar se vivía.

Pocos días después, el padre de Jimenes Grullón, José Manuel Jimenes, quien había apoyado a Trujillo para que alcanzara la presidencia de la República, fue puesto en libertad, produciendo esto un gran júbilo en Juan Isidro que no soportaba ver a su padre padeciendo la injusticia que se vivía en esa cárcel.

Fue en este escenario que Juan Isidro Jimenes Grullón tuvo que maniobrar y soportar muchos vejámenes y ofensas de hombres que se encontraban anquilosados en la barbarie de hacía más de 2500 años, únicamente por hecho de mantenerse vivo para luchar a favor de un país justo y contra del oprobio que se vivía para entonces.

Pero, ¿acaso quería la mayoría de estos hombres vivir así?
-Claro que no. Estaban compelidos, por el momento, a ceñirse a ese modo de vida para no caer en desgracia con el régimen dictatorial que imperaba. Régimen que contó con el apoyo incondicional de una clase religiosa prosternada, solamente por obtener ciertos privilegios y beneficios, una clase alta que solo le importaba salvaguardar sus intereses, sin importar cómo, la mirada indiferente del imperio norteamericano que procuraba obtener ganancias a través de sus empresas por las facilidades que le brindaba la dictadura de Trujillo, y un campesinado, que aunque tuviera deseo de lanzarse a la lucha, pues no tenía armas para enfrentar a la dictadura, aun fueran liderados por caudillo, ya que durante la ocupación militar, el pueblo quedó desarmado.

La cárcel era un antro de perversidad. El augurio del que caía preso en ese lugar era fácil de establecer, estaba destinado a morir tanto física como espiritualmente. Estaba destinado a los continuos interrogatorios de la Comisión Investigadora, en su afán de no dejar dudas acerca de de los que complotaban en contra de la dictadura, el asedio de los centinelas que por cualquier nimiedad ofendían y golpeaban a los presos, en algunos casos hasta morir. También, los presos, sin importar su nivel académico y el delito cometido, recibían el mismo trato ante los custodios de la penitenciaría de Nigua.

Cabe decir que los de carácter político recibían peor castigo que los delincuentes comunes, pues los últimos no representaban una amenaza seria en contra del poder del "Jefe". Era por eso que a los presos políticos los atormentaban y torturaban sin piedad, y en los casos más extremos, después de una paliza los llevaban a "Camunguí" (siempre de noche como recodando las noches de San Bartolomé en Europa), lugar donde se efectuaban fusilamientos. Pero, ¿terminaban aquí las vejaciones?-Jamás. Las celdas eran inhóspitas, además de dormir en el piso, madera o una hamaca, los presos estaban expuestos a mordiscos de ratones y picaduras de mosquitos anofeles que producían paludismo y que podía causar la muerte, por hecho de que los reclusos no estaban bien alimentados, sino enfermos; y a pesar de esta situación, tenían que realizar trabajos duros y difíciles. Pero, no se quedaban los agravios.
Adolf Hitler
Fue en este ambiente en el cual tuvo que pasar varios meses de prisión Jimenes Grullón, viendo como morían algunos de sus compañeros, ya fueran asesinados o por enfermedad.

La impotencia se apodero de él en múltiples ocasiones; deseó hasta la muerte, y no vivir en ese vía crucis. También padeció los mismos sufrimientos de sus amigos presos, aunque no murió. Ya enfermo, a pesar de su juventud, es trasladado de Nigua a Santo Domingo (Cárcel del Homenaje) donde es tratado clínicamente. Recibe atenciones médicas, y logra curar el paludismo, gracias al contacto que logra, al principio, con sus familiares que les hacen llegar ciertos recursos y pastillas de quinina con un preso de confianza, quien salía del recinto cada cierto tiempo.

Son los acontecimientos mencionados que ponen a Jimenes Grullón y a sus compañeros de prisión a pensar seriamente en si estábamos en medio de una Gestapo en América, refiriéndose a la policía secreta y de seguridad estatal que se había creado en Prusia al servicio de Adolf Hitler, el 26 de abril de 1933, cuya primer director fue Rudolf Diels, pero que cobró notoriedad por la cantidad de crimen que perpetró a partir del momento en que su dirección pasa a las manos de Hermann Göring, cuando el poder de la Gestapo se expande por toda Alemania, excepto Baviera donde Himmler y su SS tenían el control de la seguridad y el espionaje nazi. La función de este cuerpo represivo y de espionaje, formado por policías de carrera y profesionales del Derecho, era combatir e investigar todas las tendencias peligrosas para el Estado. Sus acciones criminales no estaban sometidas a la revisión judicial. Lo mismo se observaba en las acciones repugnantes que los cuerpos de represión y caliesaje llevaban a cabo en nuestro territorio.
Pues, era notorio que los soldados o policías, salvo raras excepciones, tenían patente de corso para cometer atropellos y nadie intervenía en su accionar. Solamente si el "Jefe" estimaba que se actuó en contra de lo que él entendía justo y necesario, o pudiera crearle algún escándalo o dificultad dentro del gobierno.







Víctimas de la Gestapo,
Lager Nordhausen, 1945

En fin, las similitudes entre ambos regímenes era casi absoluta: las misma técnicas, la misma estructura, idénticos servicios e idénticas finalidades, salvo la diferencia de que "el monstruo ario" quería (fuera una aventura o no) la expansión total de su país por toda Europa, en su afán de agigantar ese imperio. El de Santo Domingo, se apoyó en su maquinaria militar para mantenerse en el gobierno con el único objetivo de enriquecerse insaciablemente, él y sus acólitos.




2.6 Estadía de Jimenes Grullón en la cárcel de Santo domingo (La Cárcel del Homenaje)

Luego de la supervisión que hiciera un médico encargado de monitorear las cárceles para observar el estado de salud que presentaban los presidiarios, ante tan desagradable realidad este informó en Santo Domingo de las barbaries que caracterizaban esa mazmorra.

Fue así como después de de tres o cuatro horas, llegó una ambulancia y trasladó a varios reclusos a la ciudad de Santo Domingo, entre ellos Juan Isidro Jimenes Grullón.

A partir de entonces, su vida, dentro de la desgracia, registra un pequeño cambio. Pues, la cárcel de Santo Domingo era muy distinta a aquel averno de Nigua, donde los hombres estaban destinados a padecer los momentos más tétricos de sus vidas.

En el nuevo recinto, él y los presos logran curar el paludismo, y sus vidas experimentan cierta mejoría. Claro está, no eran tan pronunciadas las diferencias entre uno y otra. Pues en las cárceles de aquellos tiempos los hombres se degeneraban de una forma tal, que se volvían homosexuales, y agudizaban sus defectos y vicios.

En la nueva cárcel, logra hacer varios amigos, además de los que llegaron con él desde Nigua. Cabe mencionar: Duran; el vendedor de café y cigarrillos, Arnaldo; preso de confianza y que ayudó mucho a Jimenes Grullón y a otros presos con los mandados que hacía, Diógenes; cuidaba y curaba los enfermos, Patiñito, Moño Castro, Augusto Lora, saleta, Esteban, entre otros.

En este presidio, los presos no salían a desyerbar terrenos incultivables, sino que eran utilizados para trabajar en las fincas de los jefes militares, los familiares de Trujillo y, por supuesto, el déspota.

Después de algunos meses en esta cárcel, llegó la orden de que los presos políticos debían ir a trabajar en la reconstrucción de la antigua casa presidencial, en la cual vivió el autor de "Una Gestapo en América", Dr. Juan Isidro Jimenes Grullón, en sus años de niñez. Pues su abuelo, el ex presidente, Juan Isidro Jimenes (1914-1916). En esa reconstrucción, el médico por poco y pierde la vida, ante la indolencia de un soldado que custodiaba la obra.
Ex presidente
Juan Isidro Jimenes

Ya a mediados del 1935 un grupo de mujeres de la ciudad de Santiago había solicitado al tirano la puesta en libertad de los presos políticos que cayeron tras el fracaso de la conspiración que habían urdido un año atrás.

Los reclamos de las decididas mujeres no habían sido atendidos, lo que produjo un profundo de sentimiento de rechazo en esa ciudad, que desde principio se tornó adversa a las pretensiones de éste, de convertirse nuevamente en presidente del país.

Fue tan profunda la ira que causaba la falta de atención de Trujillo al encargo de las mujeres santiagueras y a la sociedad en sentido general, que éstas se disponían a ir personalmente a Santo Domingo para solicitar la libertad de los presos políticos ante el dictador.

Pero las mujeres sabían del regreso al país de la ex esposa de Trujillo, la señora Bienvenida Ricardo, además de estar enteradas de que el tirano le había prometido a la señora Ricardo complacerla en lo que pidiera, como una forma de resarcir el perjuicio cometido en su contra mientras ella se encontraba en Francia.

Las damas santiagueras, incluyendo la madre de Juan Isidro Jimenes Grullón. Sabían de las benevolencias de la señora Ricardo y acudieron a ésta para que solicitara el presidente la libertad de los imputados, lo cual aceptó y logró.
Luego de una farsa judicial celebrada con el único objetivo de confundir a la población de lo condescendiente que era el tirano y su régimen, fueron puestos en libertad el 31 de octubre de 1935 Jimenes Grullón, Vila Piola y José Najul, no sin antes de que el gobierno cometiera varias ridiculeces, como por ejemplo regresarlo a la cárcel de Nigua.
Ciudad de Santo Domingo Durante La Tiranía
Puesto en libertad, Jimenes Grullón, optó por salir del país, lo que logró. Rechazó las tentaciones del régimen trujillista de nombrarlo en una cartera para que este colaborara con el gobierno. Se marchó del país hasta después del tiranicidio del 30 de mayo de 1961, cuando finalmente cayó abatido el tirano que había hecho de la República Dominicana su finca personal.

2.7 Conclusión
Como acabamos de ver en este sintético informe de lectura, los ideales perversos de un grupo de lacras y escorias pueden mancillar las buenas costumbres de un pueblo, y lo más grave, conculcarle la libertad de convivir en un mundo donde impere la justicia. Estando al tanto de estas cosas, es necesario que evitemos por todos los medios volver a caer en una desventura como la que vivió el país desde 1930 hasta 1961. Fue en ese escenario donde se privó al pueblo, en sentido general, de alcanzar su pleno desarrollo, ya que quienes gobernaron se vinieron a servir de ésta como si fuera barril de su propiedad. Claro está, se valieron de los métodos más espurios para lograr tal hazaña.

Encaminemos la patria por los mejores senderos, con el único fin de que nuestros hombres y mujeres de trabajo sean los más beneficiados de la riqueza que se origina en el país, y no el grupúsculo que lo ha venido haciendo hasta el momento. Digamos: no al nepotismo, al caudillismo y a las formas tiránicas de gobernar.

1 comentario:

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