Miguel Tejada Manny Ramírez
A diferencia de lo que sucede en los equipos de la capital
dominicana, en los que parece no haber equipos definidos, las Águilas Cibaeñas (15-9) y su
gerencia están convencidas de que un torneo se gana cuando el pelotón tiene sus
soldados colocados en la posición clave y no hay espacios para improvisar.
Para que lo anteriormente dicho sea posible, los cibaeños
han optado por utilizar sus jugadores estrellas temprano en la temporada, y así
evitar que lleguen fuera de forma y con arritmia en el bate al “Todos contra
Todos”.
Pero, los santiagueros no sólo buscan que sus peloteros estén
listos con miras a las semifinales, sino que quieren aprovechar el factor
motivación para construir una maquinaria devastadora en este torneo de béisbol invernal In Memoriam al
doctor José Hazim Azar.
Motivación es la clave y la carta debajo de la manga que el
gerente del equipo más aguerrido de este béisbol caribeño, Winston “Chilote” Llenas,
tenía guardada. Es por ello que apela a la participación de Miguel Tejada (286-1-11),
cuya producción y liderazgo en este béisbol no amerita discusión, y Manny
Ramírez (429-1-1), que a pesar de no participar en este béisbol con la misma consistencia
de Tejada, mantiene una popularidad inconmensurable en los seguidores del
deporte número uno en el país.
Manny y Miguel han descollado en el béisbol de Grandes
Ligas, ganándose el respeto de sus compañeros de carrera y la admiración de la
gran fanaticada dominicana. Su participación en esta temporada de pelota
provocará la integración al equipo de las Águilas Cibaeñas de otras figuras
estelares en el béisbol de Estados Unidos y el rendimiento doble de los noveles
que comenzaron a jugar desde el principio del torneo. He aquí la diferencia en
este torneo de beisbol 2012-2013: inspiración.
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