Infórmate Hoy y Siempre

Infórmate Hoy y Siempre

miércoles, 17 de marzo de 2010

El Casandra sin sorpresa



El modelo de premiación que utiliza la Asociación de Cronista de Arte (ACROARTE) de la República Dominicana es objeto de una revisión inmediata.

Son muchas las dudas y suspicacias que surgen tras la premiación de cada año. Por ejemplo, en esta ocasión sucedió con la agrupación de bachata Aventura, que tuvo un año 2009 formidable, pero no para llevarse todos los trofeos o premios como señal de que el arte popular está limitado a esa agrupación.

Esta misma situación ya se presentó en el pasado con Juan Luis Guerra, Pochy Familia, Fernando Villalona, Héctor Acosta, entre otros, quienes en una sola premiación, obtuvieron 5 y 6 distinciones, y alrededor de diez nominaciones a diferentes renglones.

Si partimos de lo dinámico que el arte es, entonces concluimos señalando que los cronistas de arte son neófitos, sordos, ciegos, haraganes, incautos, desconocedores de la historia reciente de nuestros artistas y cualquier calificativo despectivo al que podamos recurrir.

Decimos esto, porque en el país, por lo menos en el género bachata, hubo trabajos iguales o mejores que los de Aventura en cuanto a pegada, si de ahí fue que partieron los analistas. Ningún bachatero sonó más, a nivel de discoteca, colmadones y la radio que Luis Miguel, secundado por Joe Veras, quien sonó su produccion completa.

Pero, esto tiene una explicación sencilla. Pocos cronistas se detienen, ya sea porque disponen de poco tiempo o por cualquier otra razón, a seguir en su conjunto la cantidad de bachateros que hay en el país, limitándose al trabajo de los que más le simpatizan o por los que más se identifican con su "clase".

Lo cierto es que esta actitud favorece poco el arte. Cuantos más sean premiados, mayor la posibilidad de que el talento crezca, acabando de esta manera con la monotonía a que estamos acostumbrados año tras año.

En cuanto el "Soberano", debe partirse de un solo criterio: el historial del artista durante 10 o 15 años, sin andarse con muchos rodeos para que así se cumpla. Tampoco, darlo más de una vez a un artista. Es injusto beneficiar a un grupo de artistas de nuestra predilección, en desmedro de una inmensa mayoría que hace posible que el arte se matenga en constante crecimiento; no sólo cuantitativo, sino cualitativo.

Con esto quiero significar que Aventura o sus integrantes debieron esperar 2 ó 3 años más para recibir este máximo galardón: El Soberano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario