Faltando nueve juegos a Leones, Águilas, Estrellas y Toros;
en tanto que Tigres y Gigantes deben jugar 10 encuentros cada uno para
completar la justa invernal, es de suma importancia una reacción rápida para
Gigantes y Toros.
Los conjuntos de San Francisco de Macorís y de La Romana han
estado resbalando en los últimos 10 partidos. Los Gigantes compilan 3-7 y los
Toros registran 2-8 para ser los peores equipos durante este trayecto.
Ambos equipos han visto reducir sus ventajas con relación a
Leones y Tigres, que se han acercado a 3 (Tigres) y 2.5 (Leones) juegos de los Gigantes que ocupan el cuarto
lugar clasificatorio.
El asedio también amenaza a los Toros en el tercer lugar.
Los romanenses solo aventajan con 4 (Leones) y
4.5 juegos (Tigres), cuando antes de la sequía colectiva, estuvieron a 8
y 9 partidos por encima de ambos equipos capitaleños.
Tigres y Leones deberán enfrentarse dos veces entre ellos
mismos, lo que podría perjudicarlos en la búsqueda de la cuarta y tercera plazas
clasificatorias, pero los dos equipos se enfrentarán dos veces a los Gigantes y
a los Toros, estando sus destinos en sus propias manos.
De su lado, Gigantes y Toros se enfrentarán dos veces contra
Águilas y Estrellas, ya clasificados y que para proteger a sus estelares, disminuirán en la intensidad de juego. Esto
podría ser aprovechado por ellos.
Será interesante ver qué combinaciones se producirán en lo
adelante y a cuáles equipos beneficiarán. A ningún conjunto le luce perder juegos, por
lo que tendrá que mejorar sus ejecutorias en cada encuentro. Es un asunto de
juego a juego.
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